El botín, a salvo

Luis Roldán saldrá a la calle con la mayoría de su patrimonio intacto, pese a que lo obtuvo mediante la comisión de un rosario de delitos. La justicia sólo ha conseguido embargar cuatro de los 15 pisos y fincas que atesoró el ex director general de la Guardia Civil y el Estado ha recuperado 1.202.024 euros (200 millones de pesetas), el 7% de los 18.847.739 euros (3.136 millones de pesetas) que el reo adeuda en indemnizaciones y multas impuestas por el tribunal.

La Audiencia de Madrid ha embargado dos chalés adquiridos por Roldán y su esposa, Blanca Rodríguez -que salió de la cárcel en el año 2000-, en Rota (Cádiz), otro en Cambrils (Tarragona), el piso en el que residían los padres del ex jefe de la Guardia Civil en Zaragoza y cinco plazas de garaje. La subasta de estos bienes comenzó en junio de 2001 en el procedimiento civil que se sigue contra el preso y que ya supera los tres tomos.

Mediante ventas ficticias y testaferros, Roldán salvó sus joyas inmobiliarias de París y San Bartolomé (Antillas francesas), valoradas en 2.434.099 euros (405 millones de pesetas). El hombre que protagonizó el mayor escándalo de la etapa socialista se valió de Francisco Paesa, que actuó como intermediario para su captura en Laos, para que le pusiera a buen recaudo en Singapur los 10 millones de euros (1.700 millones de pesetas) que ocultaba en Suiza. La causa contra Paesa por encubrimiento se archivó después de que el ex agente de Interior simulara su muerte en Bangkok (Tailandia).