Buenos movimientos de CiU

Estos días estoy leyendo varias críticas al presidente Jordi Pujol. Por una parte, se dice que tiene un final 'agónico' y cosas similares. Por otra, se critican los cambios realizados en el Gobierno de la Generalitat y se recrimina a CiU que el presidente ceda responsabilidades al conseller en cap, Artur Mas. Yo, en cambio, tengo unas sensaciones totalmente diferentes. Desde el reajuste se ha dicho muy poco que más importante que el cambio de nombres ha sido la reestructuración de los departamentos.

Una modificación impulsada por Artur Mas que ayudará a desarrollar una mejor y más moderna gestión del Gobierno de la Generalitat. Una medida inteligente y que ha cogido por sorpresa a la oposición. Por otra parte, el hecho de que Pujol haya permitido a Mas asumir más protagonismo es una medida más natural de dar el relevo de la que hicieron los socialistas. Pujol continúa siendo presidente con todo lo que ello comporta. Por el contrario, Pasqual Maragall, Joaquim Nadal y Manuel Royes decidieron dejar la alcaldía a medio mandato, dejaron plantados a los ciudadanos y colocaron a su sucesor.

Ahora, lo que me gustaría es que durante este año, el Gobierno de la Generalitat ejerciera una buena acción de gobierno y de esta forma no perdiera la confianza que he depositado en este nuevo equipo capitaneado por Mas y presidido por Pujol.