El 50% del personal del Infoca estaba inactivo al inicio del incendio de Bodíjar

La mitad del personal y dos de los tres helicópteros que el Infoca tiene en la provincia de Granada se encontraban inactivos el pasado sábado, cuando comenzó el incendio en la sierra de Bodíjar que ha arrasado 2.800 hectáreas de terreno y provocó la muerte de un hombre de 28 años. Miembros de este servicio de extinción, tanto de UGT como de CC OO, aseguraron ayer que la disponibilidad de todos los medios hubiera permitido controlar el incendio antes.

A pesar de que las circunstancias meteorológicas adversas llevaron al Infoca a reactivar el plan de emergencia sólo unos días antes del inicio de este importante incendio que se dio ayer por extinguido a las 16.30 horas, el 30% de los empleados se encontraba el pasado sábado de vacaciones y otro 20% de ellos habían finalizado sus contratos tras el término de la campaña de verano, según informó el capataz de retén y miembro de UGT, Emilio del Pino.

Tanto UGT como CC OO pidieron ayer a la Consejería de Medio Ambiente que mantenga todo el año el mismo número de trabajadores en el Infoca, sobre todo en Andalucía oriental, donde la climatología favorece la declaración de incendios en estaciones distintas al verano. Los sindicatos proponen que durante los meses de invierno el personal del Infoca se dedique también a labores de prevención en el monte.

El grupo político Los Verdes de Andalucía se mostró ayer contrario a esta propuesta de los sindicatos pues 'tememos que para tener retenes inmóviles esperando a que surja un incendio en invierno se va a quitar dinero destinado a los trabajos de prevención'.

El portavoz de este partido, Francisco Garrido, aseguró que la mayor parte de las explotaciones agrícolas y los invernaderos que resultaron calcinados en este incendio eran ilegales. Por ello pidió a las administraciones que sean muy 'selectivas' a la hora de proporcionar ayudas o subvenciones a los afectados para que no se recompense a los que se encontraban en situación irregular. A su juicio, la progresiva aproximación de la agricultura sin licencia a los montes supone un gran riesgo de incendios.