Equipamientos, vivienda nueva y edificios rehabilitados

Un paseo por Ciutat Vella permitirá al ciudadano que lo desee observar el resultado de la rehabilitación de 47 edificios situados en calles tan diversas como las de Arc del Teatre, Carme, Tallers, Sant Ramon, Hospital y Ferlandina. No hay barrio de Ciutat Vella donde los artesanos de la rehabilitación no hayan recuperado viviendas, con un criterio relativamente claro: el resultado tenía que poder competir con las viviendas nuevas que se construían en la zona.

Algunas de estas nuevas viviendas son de una arquitectura más que aceptable. El consistorio rechaza destacar ninguno de los 20 nuevos edificios construidos, pero algunos de los responsables sienten especial predilección por algunos de ellos. Por ejemplo, el situado en la confluencia de las calles del Carme y Roig, con 28 viviendas y obra de Josep Llinàs, con una solución imaginativa que repercute en una ampliación de esa última calle. O el de Rodríguez Cambras, en las calles de Cortines y Portal Nou, que incluye un patio interior que recuerda las corralas madrileñas. En la calle de Fonollar, del número 11 al 17, hay un edificio de Jordi Balarí que recupera la tradición del esgrafiado, y la plaza del Padrò tiene una construcción de Daniel Freixa que destaca por su adecuación al entorno.

No menos orgullo sienten los responsables del distrito (los de ahora y los de antes, entre los que están Joan Clos y Xavier Casas como gestores directos) por equipamientos como el Pati Llimona, el centro cívico de la Barceloneta y la recuperación del Frontón Colón, del que apenas se ha conservado la fachada.

Respecto a los procesos de reurbanización, destaca la Rambla del Raval, pero también el parque de Sant Pau (junto a la iglesia homónima), las calles de Maria Aurèlia Capmany y Sant Oleguer, la plaza de George Orwell y la de Hilari Salvador. Esta última, junto a la renovación de la calle de Churruca, ha transformado la Barceloneta.