El Gobierno se plantea el cierre de la frontera ceutí de Benzú

La Delegación del Gobierno en Ceuta advirtió ayer de la posibilidad de cerrar el paso de Benzú, una de las dos fronteras terrestres que separan la ciudad de Marruecos, debido a los altercados registrados en la zona y a la entrada indiscriminada de inmigrantes por el mismo.

El delegado del Gobierno, Luis Vicente Moro, declaró: 'Mi posición, que es conocida por las autoridades de la Ciudad Autónoma, es proceder ordenadamente al cierre'. Aludió a los frecuentes apedreamientos contra la Guardia Civil y añadió: '[Por Benzú] se están colando menores, argelinos, hindúes y pakistaníes porque es imposible efectuar un control de todos. El 80% o 90% de los inmigrantes que acceden a Ceuta lo hacen por allí'. Declaró que, según los especialistas policiales, la zona 'se ha convertido en el principal problema de entrada de inmigrantes en Ceuta'.

Casi al mismo tiempo que el delegado del Gobierno hacía estas declaraciones, tres subsaharianos indocumentados entraban ilegalmente en la ciudad nadando desde Marruecos y se presentaban, aún con las ropas mojadas, en el Centro de Estancia Temporal (CETI), donde no pudieron ser acogidos por falta de espacio. Un centenar de inmigrantes, la mayoría argelinos, viven en las calles de Ceuta a la espera de ingresar en el CETI.

Niños en Algeciras

La policía del puerto de Algeciras (Cádiz) detuvo ayer a nueve indocumentados magrebíes. Cinco de ellos eran niños de entre nueve y 12 años, y desembarcaron de un transbordador procedente de Tánger descolgándose por los cabos de amarre.

Siete de los irregulares, entre ellos los cinco menores, llegaron en el buque Las Palmas de Gran Canaria, que atracó a las 4.30 procedente de Tánger. Otros dos magrebíes indocumentados fueron localizados por los agentes portuarios durante la tarde de ayer. Todos quedaron a disposición del Cuerpo Nacional de Policía.