'La estética de la música jazz es en blanco y negro'

Pedro Párraga (Madrid, 1951) organiza sus vacaciones desde hace años en función del Festival de Jazz donostiarra. Es un apasionado de la estética de la música y en este certamen ha encontrado la llave para sacar partido a dos de sus aficiones: el jazz y la fotografía. Párraga, autor de los carteles del Jazzaldia de los años 1987 y 1989 junto a Antton Olariaga, expone actualmente en el Hotel María Cristina una decena de retratos de grandes figuras que han pasado por el certamen, desde el trompetista Miles Davis a los saxos Dexter Gordon o Joe Henderson. Son instantáneas tomadas en momentos en los que el artista improvisa y se muestra más libre.

Pregunta. ¿Le ha servido su experiencia anterior en artes gráficas?

Respuesta. Te enseña a ver la foto, que es lo más difícil. De nada sirve si no tener una técnica maravillosa y la mejor máquina del mundo.

P. ¿Hay dificultades añadidas para lograr buenas fotos en un concierto?

R. No controlamos las luces y normalmente tenemos que trabajar con película forzada. Además somos muchos y apenas nos dejan tres minutos para retratar a los artistas. Hacemos todos casi lo mismo.

P. ¿Entonces, lo de captar el momento es una utopía?

R. Es complicado hacer fotos que parecen casi retratos, porque para eso tienes que buscar ese momento en el que te miran o tienen una actitud que te llena. Me suele gustar hacer fotos en el bis, cuando el resto de fotógrafos se ha ido y el músico está relajado.

P. ¿Cree que una fotografía puede llegar a tener la misma magia que un momento en vivo?

R. Para el que la hace sí, aunque captar la música es imposible. El éxito sería transmitir eso al espectador.

P. ¿Por qué el blanco y negro?

R. Para mí la estética del jazz es en blanco y negro, resalta más al individuo y sus gestos.