'Antes se rompían las encuestas que no gustaban, pero ésta ha sido un error'

El secretario de Estado para las Relaciones con las Cortes trató de desviar las preguntas sobre la encuesta fallida del CIS, que tras hacer 9.000 entrevistas de un total de 15.000 y gastarse 37 millones de pesetas, ha suspendido un sondeo que preparaba por errores en la muestra. Ante la enésima polémica del CIS; el secretario de Estado se remitió primero a lo declarado por el presidente del CIS, Ricardo Montoro: 'Ha habido un problema técnico. Me preocupa que alguien se atreva a pensar que hay otro tipo de motivos', dijo en referencua a los socialistas, que sostienen que se ha parado la encuesta porque les era muy favorable. 'Estaba muy avanzado el trabajo de campo, pero los datos no estaban tabulados, eso es imposible', continuó.

Ante la segunda pregunta sobre el asunto, y visto que el tema que le había llevado allí, la encuesta de Perejil, no suscitaba cuestiones, Fernández Díaz entró de lleno contra el PSOE. ¿Hay algún precedente de un error de este calibre?, se le preguntó. Respondió, visiblemente molesto: 'Es que antes si no gustaban los resultados se rompían. Ahora tenemos una ley que obliga a que sean presentados al Parlamento cuando contienen intención de voto. Estamos cumpliendo más allá de la ley. Mire, si no hubiéramos anunciado esta encuesta no se sabría nada'. Su enfado iba en aumento. Ante la tercera pregunta, rechazó la posibilidad de depurar responsabilidades. 'Bueno, si se pide la comparecencia, se hará', concedió. Y ante la cuarta pregunta, primero dijo, 'mire, yo no voy a hablar más de este tema', y luego añadió: 'El que esté libre de error humano que tire la primera piedra', para terminar, una vez más, lamentándose: 'si no lo hubiéramos dicho, no se habría enterado nadie'.