El alcalde de Jaén prohíbe al candidato del PSOE utilizar una sala municipal

PP y PSOE protagonizaron ayer el primer encontronazo en el pulso que mantienen por conquistar la alcaldía de Jaén en las próximas elecciones municipales. El alcalde jiennense, Miguel Sánchez de Alcázar (PP), prohibió al candidato socialista, Marcos Gutiérrez Melgarejo, que no es miembro de la Corporación, la utilización de la sala de prensa del Ayuntamiento por entender que hace 'un mal uso partidista'.

'Si algún candidato quisiera hacer campaña beneficiándose de recursos para los que todavía no está legitimado a utilizar, solicitamos se abstenga de tal acción', expone Sánchez de Alcázar en una circular interna entregada a los grupos de la oposición minutos antes del inicio de la rueda de prensa donde el candidato del PSOE, acompañado del actual portavoz municipal, Manuel López, iban a comparecer para valorar los tres años de gestión del PP en Jaén.

El PSOE hizo caso omiso del requerimiento del alcalde, al que acusó de mantener una 'actitud fascista' y de cometer 'la mayor tropelía y afrenta democrática de los últimos años'. El portavoz socialista, Manuel López, aseguró que el alcalde tendrá que enviar a 'la brigada Brunete' para impedirles ejercer un derecho constitucional.

López relacionó lo ocurrido ayer con el 'pánico' que el alcalde tiene al candidato socialista y añadió que tanto el PP como IU han ofrecido en varias ocasiones ruedas de prensa acompañados de miembros que no pertenecen a la Corporación.

Marcos Gutiérrez dijo que seguirá utilizando 'la casa de todos los jiennenses' siempre que lo estime oportuno e instó al alcalde a 'no perder los nervios, porque la alternancia en política es normal'. En la rueda de prensa, el PSOE criticó a Sánchez de Alcázar por la deuda municipal, la quiebra social entre los diferentes barrios de la ciudad, el mal funcionamiento de los servicios públicos o los eternos problemas con el abastecimiento de agua.