El Gobierno tilda de 'injusta' la decisión de cerrar Fontaneda

El ministro de la Presidencia, Juan José Lucas, manifestó ayer en Murcia que se siente 'solidario' con los trabajadores de la fábrica de galletas Fontaneda en Aguilar de Campoo (Palencia), al tiempo que pidió que la decisión de cierre de la misma 'sea sometida a revisión por parte de las autoridades multinacionales'. El ministro, que calificó la decisión de cierre de 'injusta', señaló que, a su juicio, las grandes multinacionales 'también tienen que tener un poco de sangre en las venas y tienen que obrar con criterios no puramente crematísticos, sino conociendo la realidad social'.

Lucas aseguró que 'desgajar las galletas maría es sustraer una parte de la historia de Aguilar de Campoo, ya que la fábrica forma parte del pueblo, que tiene 7.000 habitantes'. 'Desde el punto de vista personal y político, me parece una decisión desacertada y solicito su revisión', subrayó, añadiendo que 'me parecen más desacertadas todavía decisiones demagógicas de partidos de la oposición que se apuntan a un carro'.