Optimismo entre los empresarios del calzado tras la feria de Düsseldorf

La Feria de Calzado de Düsseldorf (GDS), el principal evento mundial de este sector, terminó el pasado domingo con unos niveles de participación y negocio bajos, aunque no tanto como se esperaba, según afirma Pedro Méndez, portavoz de la patronal zapatera ilicitana.

La crisis económica internacional, que ha afectado sobre todo al consumo de grandes potencias como Estados Unidos y Alemania, hacía prever un fracaso de la GDS. Sin embargo, la presencia de empresarios árabes y estadounidenses, que faltaron a la edición de invierno a causa de los atentados del 11 de septiembre, ha terminado avivando el desarrollo de la feria germana. 'Esto nos hace ser optimistas ya que confirma nuestras predicciones: un primer semestre moderado y recuperación a partir de otoño', explica Méndez.

Lo cierto es que a comienzos de la GDS las expectativas no eran tan halagüeñas. La participación de las empresas españolas en el evento se redujo drásticamente. En la actual edición, tan solo exponen 181 firmas nacionales, frente a las 200 de 2001, lo que significa una disminución del 9,5 %. El 70% de las empresas de calzado españolas están radicadas en la Comunidad Valenciana, la mayor parte de ellas en la cuenca del Vinalopó (Elda, Villena y Elche). Precisamente las firmas valencianas han sido las más reticentes a acudir esta vez a la feria de Düsseldorf. De las 145 que participaron en la edición anterior, tan sólo han repetido 128, una reducción del 11%. Italia destaca como primer expositor y principal rival español, con 400 firmas en la GDS.

Para la Federación Española de Industrias del Calzado (FICE)la actitud de los empresarios nacionales 'no ha sido prudente', ya que 'en épocas de crisis resulta importante sondear los mercados exteriores, para partir en una posición segura cuando la economía mejore', explica García Lillo, secretario de FICE.