La comunidad universitaria advierte de que el asalto al rectorado no debe 'demonizar' la lucha contra la LOU

Un grupo de profesores de la coordinadora andaluza de docentes e investigadores universitarios contra la Ley Orgánica de Universidades (Cadiuc) pidió ayer 'calma' para analizar los incidentes acurridos el viernes en el rectorado de la Universidad de Sevilla, cuando un grupo de estudiantes entró violentamente en el edificio para boicotear la junta de gobierno. Según Luis de Andrés, miembro de Cadiuc, hay que evitar que estos actos acaben 'demonizando' la lucha contra la LOU.

'El viernes se hicieron valoraciones muy rápidas. La LOU sigue siendo mala y esto no nos puede hacer perder el norte', afirmó de Andrés, quien criticó 'el uso de la violencia para protestar', pero subrayó que el movimiento anti LOU, incluido el de la acampada, ha sido 'pacífico' hasta ahora.

El miedo a que se desvirtue la lucha contra la LOU es común en casi toda la comunidad universitaria. La consejera de Educación, Cándida Martínez, insistió ayer en diferenciar al conjunto de estudiantes que ha mantenido una posición crítica hacia la LOU, 'pero siempre desde el respeto', de los que el viernes protagonizaron el boicoteo a la junta de gobierno. 'Estos sucesos son un atentado contra las instituciones democráticas, contra los representantes universitarios democráticamente elegidos y contra la esencia misma de la vida universitaria, que se caracteriza por el respeto y el diálogo', subrayó.

El presidente de la Junta, Manuel Chaves, se unió también a la 'condena y repulsa' de lo sucedido. Para el presidente, sucesos como los del viernes 'no se pueden tolerar en una sociedad democrática' y perjudican al movimiento anti LOU. 'Los que estamos contra esta ley no necesitamos para nada que ningún grupo minoritario lleve a cabo actos de violencia', afirmó Chaves.

Los representantes del Consejo de Alumnos de la Universidad de Sevilla (Cadus) no dan abasto desde el viernes para condenar el asalto violento al rectorado. Javier Sánchez, su portavoz, criticó el hecho de que los que protagonizaron los actos exijan la convocatoria de una asamblea antes de que la junta de gobierno tome cualquier determinación sobre la aplicación de la polémica LOU. 'Hemos tenido muchas asambleas, la última el 7 de febrero, y ellos estaban invitados pero no han ido'.