Forges y la presidencia de la UE

Con sorpresa veo la viñeta de Forges en la que se ve a un ciudadano español asustado por la recién estrenada presidencia española de la UE. Forges debe de ser uno de los pocos españoles que no se enorgullecen de que su país presida la UE, postura que es producto de un socialismo progre, caduco y necio, que prefiere tirar piedras contra su propio tejado antes que ver a sus conciudadanos triunfando, aunque tengan otra ideología. Cualquier otro ciudadano europeo estaría encantado de que su país presidiera la UE. Pero Forges, no. Forges prefiere que sea otro país quien la presida. Quizá prefiera a Francia, que siempre se ha caracterizado por defender los intereses españoles, por poner un ejemplo. Para ser un buen humorista hay que ser ideológicamente independiente, virtud de la que Forges carece, me temo.