La policía investiga a 4 empresarios de Jáen por venta de permisos a inmigrantes

La policía de Jaén investiga a cuatro empresarios sospechosos de vender certificados de empadronamiento y permisos de trabajo a inmigrantes. El comisario provincial, Federico Cabello, subrayó ayer la dificultad de continuar con la investigación y formular acusaciones por la falta de testimonios incriminatorios de los inmigrantes. Por otra parte, tras unas protestas que terminaron con tres heridos, unas mil personas se manifestaron ayer en Almería contra la instalación del consulado de Rabat.

El subdelegado del Gobierno central en la provincia, Francisco López Pastor, indicó que, según los datos de la Guardia Civil, tan sólo el 3% de los inmigrantes que llegan a la provincia carece de documentación. Esta situación ha motivado ya la expulsión de una treintena de trabajadores.

Estos datos no se corresponden con los calculos de sindicatos y organizaciones no gubernamentales. Los controles de las fuerzas de seguridad indican que ya han llegado a Jaén 1.500 extranjeros no comunitarios, lo que supone una cifra superior a la de años anteriores. El primer efecto ha sido que los albergues disponibles están ya desbordados, según reconoció la delegada de Asuntos Sociales, Simona Villar. 'La situación no se puede decir que esté bien; es bastante difícil, complicada y, sobre todo, de tensión', dijo.

La recogida de aceituna no se generalizará en Jaén hasta diciembre, pero los inmigrantes llegan ya y se encuentran sin trabajo, además de sin lugares en los que vivir. De las más de 300 camas de que disponen los centros para inmigrantes situados en distintos municipios sólo se han abierto hasta el momento 80. La Junta convocó ayer una reunión con los alcaldes para pedirles 'sensibilidad', pero la delegada reconoció que aunque todas las camas estuviesen disponibles no se podrían cubrir al completo las necesidades del colectivo.

Incidentes

En Almería, las protestas contra la ubicación de un consulado de Marruecos en la calle Soldado Español se saldaron ayer con dos policías con heridas leves y un vecino que necesitó ser atendido en el hospital Torrecárdenas. Según la versión oficial, el incidente se originó cuando los vecinos del barrio Mediterráneo-Oliveros intentaron acceder al interior del local donde irá el consulado para paralizar las obras. Los vecinos afirmaron que el hombre herido era una persona mayor, de unos 70 años, que fue golpeado por un policía.

Una plataforma vecinal, creada ayer, coordinárá todas las movilizaciones para evitar la apertura del consulado. 'El lugar elegido está saturado y no es el más idóneo ni para el consulado de Marruecos ni para ninguna otra dependencia o actividad que pueda sobrecargar más esta calle', explicó un miembro de la plataforma. La primera medida del grupo fue cortar la carretera de Ronda durante una media hora. Por la tarde, más de 1.000 personas se manifestaron de forma pacífica.