La guerrilla filipina asegura que ha decapitado a un rehén estadounidense

Abu Sayyaf anunció la muerte del rehén estadounidense Guillermo Sobero, de 40 años, coincidiendo con la fiesta nacional de Filipinas, que conmemora la independencia de España, en 1898. 'La ejecución es un regalo al pueblo de Filipinas en el día de su independencia', dijo Abu Sabaya, portavoz de Abu Sayyaf, a una emisora de radio. Sabaya explicó que el cadáver decapitado de Sobero, de origen peruano y residente en California, fue abandonado en la jungla para que lo encuentren los soldados que persiguen a los guerrilleros en la isla de Basilán, a unos 900 kilómetros al sur de Manila.

El Gobierno filipino anunció anoche el hallazgo de dos cadáveres decapitados en Basilán, pero precisó que ninguno es de un rehén estadounidense. Uno de ellos es el de un nativo de la isla y el otro corresponde al de un hombre, también filipino, al parecer voluntario en las negociaciones entre el Gobierno y Abu Sayyaf. El Ejército recordó que los rebeldes han mentido en varias ocasiones al anunciar la muerte de alguno de sus rehenes. Un hermano de Sobero declaró en EE UU que había recibido sendas llamadas del Departamento de Estado y del FBI, y que ninguno de los dos organismos le confirmó la muerte del rehén.

Sobero es uno de los tres estadounidenses que junto a 17 filipinos fueron secuestrados por Abu Sayyaf el 27 de mayo en la isla de Palawan. Nueve de los filipinos han logrado escapar o han sido rescatados por el Ejército, mientras que otros dos han sido hallados muertos, aparentemente ejecutados por los rebeldes. Desde entonces, Abu Sayyaf ha capturado a otros 20 rehenes en Basilán.

La presidenta Arroyo denunció a Abu Sayyaf -que asegura luchar por un Estado independiente en el sur de Filipinas- como un grupo de bandidos interesado sólo en el dinero. 'Si Abu Sayyaf dice la verdad sobre la decapitación de Sobero, ello demuestra que es un grupo despiadado que no tiene más objetivos que asesinar a inocentes y cobrar rescates'.