El TSJ rechaza equiparar a los refuerzos de guardias de primaria con otros médicos de centros de salud
El Tribunal Superior de Justicia ha estimado en parte la demanda del Sindicato de Médicos de Asistencia Pública y ha reconocido el carácter nocturno de los facultativos de medicina general y los facultativos especialistas con nombramiento de médicos para la prestación de servicios de atención continuada (los refuerzos de guardias de primaria). El tribunal rechaza equiparar a los refuerzos de guardias de primaria con el resto de médicos de los centros de salud.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
Lo más visto
- Jubilarse a los 66 años y 8 meses llega a su fin: la nueva edad de retiro de 2026
- La Audiencia Nacional avala la decisión de Robles de retirar el nombre de Franco a una bandera de la Legión
- Un petrolero perseguido por Estados Unidos en el Caribe pintó una bandera rusa en un intento de escape
- Beyoncé se convierte en la quinta cantante en ingresar en el club de los multimillonarios
- “A mi taller vienen economistas y abogados buscando dar un cambio a su vida”: Mike Hausmann, el ebanista que se negó a vivir pegado al ordenador




























































