Unicaja, a expensas del trámite en Málaga

Salvo catástrofe de dimensiones inéditas, Unicaja repetirá final en la copa Korac este año. Ayer dejó prácticamente resuelta su eliminatoria de semifinales frente al Ricoh Astronauts de Amsterdan (Holanda). El partido careció de calidad y estuvo marcado por el desacierto de un equipo andaluz algo relajado y de un conjunto holandés con escasas aptitudes. Unicaja mantuvo una ventaja cómoda en el marcador, que no en el juego, y sólo se enfrentó a la lucha y la entrega de un rival de un nivel muy inferior, que se aferró a las ganas. Los holandeses basaron su pobre puntuación en el lanzamiento a discreción sin pasar por la elaboración de jugadas. A su base, McGuthrie, demasiado sumido en su rol de líder, no le importó la presencia de sus compañeros y agotó innumerables posesiones con excéntricos lanzamientos. El resto de la plantilla holandesa tampoco estaba decidida a enmendar a su director de orquesta.

A pesar de la inoperancia contraria, Unicaja se topó con una cancha pequeña e incómoda, donde un jugador clave en la ACB, como lo es Berni Rodríguez, anduvo perdido, quizá por la falta de costumbre en partidos europeos ante equipos correosos. Tuvo que ser Jaumin el que aportara su veteranía y se echara el peso del encuentro a sus espaldas.

Aunque logró una ventaja que le permitirá tomarse con tranquilidad el partido de vuelta en Málaga, el equipo de Bozidar Maljkovic pudo dejar totalmente resuelta la eliminatoria frente a un conjunto holandés tan humilde como poco apto para este tipo de competiciones.