Francia entrega a una etarra acusada de cuatro asesinatos

Francia entregó ayer a España a la presunta ex dirigente de ETA Carmen Guisasola Solozábal, Lourdes, quien ha sido extraditada para ser juzgada por siete delitos, cuatro de ellos de asesinato. La activista, que ha cumplido 10 años de presidio en el país vecino, fue conducida a la prisión madrileña de Soto del Real por orden del juez de la Audiencia Nacional Carlos Dívar.

La supuesta etarra formó parte entre 1983 y 1989 de los comandos Gorrotxategi y Vizcaya y posteriormente, tras la detención en septiembre de 1990 de José Javier Zabaleta, Baldo, asumió la dirección de los comandos legales (sin fichar) de ETA hasta su detención en Francia el 14 de noviembre del ese año. En 1998 fue expulsada de la banda por su comportamiento 'nada racional'.

Guisasola llegó al aeropuerto de Barajas encadenada a una agente de policía francesa y allí mismo una comisión judicial le comunicó la orden de encarcelamiento. España pidió su extradición por 15 delitos, pero Francia sólo la ha concedido por siete. Ahora será juzgada, entre otras causas, por los asesinatos del teniente coronel de la Guardia Civil Eduardo Vadillo; del policía municipal de Lekeitio (Vizcaya) Juan Rodríguez Rosales; del marinero Ignacio Montes Abad, también en Lekeitio, y del sargento de la Guardia Civil José Calvo de la Hoz.