Rickie Lee Jones en Bikini

Cierras los ojos y es como si el tiempo no hubiese pasado. Sabes, porque hay biografías consultables, que quien canta nació en 1954 y que su primer disco lo editó en 1979, pero no oyes nada que recuerde años tan lejanos. Desde el escenario fluye una voz juvenil, tierna, aguda y honda, una voz de mujer que parece haber firmado un pacto para que el diablo le permitiera mantener ese tono de voz ajeno al paso del tiempo. Estas sensaciones pudo sentir el público que hace un par de años vio en directo a Rickie Lee Jones en el festivals Blues & Ritmes de Badalona, donde la norteamericana ofreció un concierto estupendo. Y no sólo lo fue porque Rickie mantiene esa voz que sorprendió a todo el mundo cuando editó su primer disco, un álbum en el que la cantautora ya dejaba ver los ejes de su manera de entender la música. No, el éxito de Rickie Lee Jones en Badalona se debió, además, a unas canciones de extraña hermosura que viven en esa frontera entre el pop y el jazz que la artista ha convertido en uno de sus lugares de residencia. Ese hogar se ha ido construyendo gracias a discos como Pirates, Flying cowboys, Girl at the volcano, Traffic from paradise y el más reciente It's like this. La cuestión, el motivo de alegría, es que Rickie Lee Jones, una cantautora situada al nivel de grandes como Joni Mitchell, actúa esta noche en Barcelona (22.00 horas), en la sala Bikini, que se antoja el lugar idóneo para que esta artista desgrane sus canciones con esa maravillosa voz para la que el tiempo se ha negado a pasar.-