Adena reclama un plan integral contra el vandalismo en los parques de Sevilla

La asamblea local de la organización ecologista WWF / Adena en Sevilla presentó ayer su informe anual sobre los parques y jardines de la capital hispalense. La conclusión principal del estudio, que cumple su quinto año consecutivo, es que, además de los problemas de inversión y mantenimiento que sufren las zonas verdes sevillanas, es el vandalismo su principal azote.Para atajar ese problema que, si tarda en solucionarse, empeorará cada año el estado de los parques, Adena propone un plan que no se limite a actuaciones parciales de vigilancia aplicadas con horarios y zonas limitadas. Los ecologistas plantean que, además de vigilancia, se adopten medidas educativas e, incluso, se castigue a quienes se pille causando destrozos in fraganti con la realización de trabajos sociales en las zonas dañadas.

Juan José Carmona, portavoz de Adena, afirmó que, mientras el parque del Alamillo es un ejemplo a seguir por su calidad, actividades y participación, los de Celestino Mutis y Miraflores son los peores de la ciudad por su estado de abandono y sus carencias de infraestructuras. Carmona puso como ejemplo el hecho de que estos dos parques, que están vallados, no se cierran de noche y se convierten en zona de botellón y puntos de venta de drogas.