Pinochet apelará la decisión judicial de someterse a exámenes mentales

La defensa del ex dictador Augusto Pinochet recurrirá ante la Corte de Apelaciones de Santiago para impugnar la decisión del juez Juan Guzmán de someterlo a exámenes mentales antes de interrogarlo, según anunció ayer uno de sus abogados. El magistrado fijó un plazo de 30 días para que Pinochet sea examinado por psiquiatras del Servicio Médico Legal para determinar si su estado mental constituye una eximente de responsabilidad penal, en aplicación del Código de Procedimiento Penal, que obliga a esta revisión a las personas mayores de 70 años. Guzmán postergó así por el mismo periodo de 30 días el interrogatorio al ex dictador, que inicialmente había fijado para el 9 de octubre. La familia de Pinochet reaccionó molesta. "Lo encuentro terrible, porque ésta es la salida menos honrosa que hay", dijo su hijo menor, Marco Antonio, criticando que el juez busque el camino de determinar si el general está loco o demente.

Aunque Guzmán no aceptó los exámenes físicos pedidos por la defensa de Pinochet, el juez dejó entreabierta una puerta para que estos se realicen al ordenar a los médicos determinar si hay dolencias físicas que incidan en el estado mental del ex dictador.