El retorno de Beyuki

Durante los primeros días del mes en que estamos, un nombre propio acaparó toda la atención de la gente en la ciudad de Tetuán y fue tema de muchas charlas entre sus habitantes; se trata, claro, del ya ex refugiado político Abdel Hamid Beyuki, que volvía a pisar la tierra que le ha visto nacer tras 16 años de ausencia obligada.Para muchos de nosotros, este gran acontecimiento representa el triunfo de la voluntad y la honestidad sobre la corrupción y transgresión de los derechos humanos, así como no deja de ser un fiel reflejo de los signos de apertura política que experimenta nuestro país bajo el mando de su joven monarca. Por estos motivos y otros más, Beyuki fue recibido en el puerto de Tánger como un héroe de la historia contemporánea de nuestro país, haciendo honor a sus largos años de lucha y defensa de los derechos humanos desde el exilio.

Pese a ese gran recibimiento popular, a la prensa marroquí parece que no le importó mucho todo aquello y, por tanto, se limitó a hacer una cobertura muy tímida del suceso, dedicándole unas cuantas líneas en algunos periódicos nacionales solamente.

Los que queríamos satisfacer nuestra sed de conocer más sobre el particular tuvimos que volver la mirada hacia los medios de comunicación españoles tanto audiovisuales como escritos; y aquí tengo que subrayar la labor realizada por EL PAÍS, que le dedicó a ese acontecimiento un artículo que cubría casi la totalidad de la contraportada de la tirada del sábado 10 de junio de 2000, dejando clara una vez más la seriedad que le distingue y el afán de ofrecer a sus lectores las noticias importantes y en el momento exacto.

Felicidades a nuestro legendario paisano Beyuki por su reencuentro con la tierra de su infancia, y enhorabuena a la prensa española por la objetividad y profesionalidad a las que nos tiene acostumbrados.- Aulad Abdel Krim Munaem. Tetuán, Marruecos.