La victoria de la oposición en Corea del Sur endurece al Norte

La victoria de la oposición surcoreana en las elecciones legislativas del jueves podría endurecer la postura del líder norcoreano, Kim Jong-il, en las negociaciones con Seúl, ya que considera al presidente de este país, Kim Dae-jung, su mejor aliado entre los políticos surcoreanos.Pese a que toda la nación surcoreana apoya estas negociaciones para la reunificación del país, cuya celebración está prevista entre el 12 y el 14 de junio próximo, Kim Jong-il sabe que se encontrará frente a un presidente condicionado por su derrota electoral y el control que la oposición pueda hacer de la cumbre.

Sin embargo, esta situación puede servir al líder norcoreano como pretexto para levantarse de la mesa de negociación en cualquier momento o incluso, según se aproxima la fecha del inicio de la cumbre, aplazarla con la excusa de que Corea del Sur no da las suficientes garantías de éxito.

Kim Jong-il sabe que cuando se abran las puertas de su régimen puede ser devorado por su propio pueblo y, como afirman varios especialistas en asuntos coreanos, la cumbre prevista para junio es una huida hacia adelante de un viejo sistema que ya no funciona en ninguna parte.