La ONU denuncia la venta y robo de niños en Guatemala

La venta y robo de niños para adopciones internacionales es una práctica habitual en Guatemala, donde incluso se contrata a mujeres para que tengan bebés con el único objetivo de que sean adoptados, según la Comisión de Derechos Humanos de la ONU. El estudio hecho público ayer indica que los niños que se dan en adopción son, en numerosos casos, vendidos por las madres, que viven en situación de extrema pobreza, pero en muchas otras ocasiones son robados.Para legalizar la situación de los bebés robados, algunas mujeres son contratadas para hacer de sus madres naturales, lo que ha producido casos como el de una joven que en dos años y medio tuvo tres hijos a los que cedió en adopción dentro de la más estricta legalidad. Todo ello es posible por la implicación de abogados, notarios, médicos e incluso jueces, como una magistrada de menores que está siendo investigada por declarar abandonados a bebés robados que fueron entregados, más tarde, a las oficinas de adopción.

La adopción de niños, por los que se llegan a pagar 1.500.000 pesetas, es un comercio fructífero para los delincuentes gracias al gran número de niños -unos 150.000- huérfanos o abandonados durante la larga guerra civil que ha sufrido Guatemala.