El comisario Julio Hierro, suspendido cuatro años por torturas

La Audiencia Provincial de Vizcaya ha condenado al ex jefe de la Brigada de Información de Bilbao, Julio Hierro, a cuatro años de suspensión como policía y a cuatro meses de cárcel por sendos delitos de torturas. Hierro ya había sido condenado por esta misma Audiencia por un delito similar y a más de cinco de cárcel por participar en el secuestro de Segundo Marey, la primera acción reivindicada por los GAL, por el que está indultado.La sentencia considera probado que el 2 de febrero de 1984, el comisario Hierro golpeó en las espalda, el cuello y los testículos y "propinó golpes en las piernas y en los oídos" a José Ramón Quintana Garmendia, en las dependencias policiales de la comisaría bilbaína de Indautxu. Quintana, entonces miembro del grupo terrorista Iraultza, había sido detenido junto a Kepa Otero García, después de haber colocado una bomba en un banco francés.

La resolución añade que el 3 de febrero, Hierro "practicó con el detenido un simulacro de castración" a la vez que era "golpeado por el encausado y otros policías en los testículos durante 20 minutos". Además, indica que el acusado interrogó con golpes al otro detenido y le aplicó electrodos en las manos. Por esta causa ya fueron condenados por torturas en 1998 tres agentes de la policía. La sala ha valorado tanto las declaraciones de los dos acusadores, que considera "minuciosas y verosímiles", como las declaraciones del médico forense y los dictámenes de las múltiples lesiones.

La Audiencia absuelve a Hierro de los delitos de amenazas y lesiones, pero le condena a abonar sendas indemnizaciones de 600.000 y de 300.000 pesetas para los dos torturados, y declara al Estado responsable civil subsidiario.