Mujeres

El Parlamento kuwaití tuvo esta semana una oportunidad de dejar una estela en la conservadora región del Golfo (...). La Asamblea de Kuwait es única en el Golfo, ya que es un órgano elegido en vez de un consejo consultivo aprobado oficialmente. Pero todos sus miembros son hombres. Son votados para su puesto por otros tantos 113.000 electores varones aptos en el padrón electoral. El supuesto camino hacia la gloria del Parlamento era un proyecto de ley, apoyado por la familia real, que daría derechos políticos totales a las mujeres kuwaitíes. La votación era la culminación de meses de intensas discusiones. Pero cuando llegó el momento final, la moción fue derrotada.¿Para esto hicimos la guerra del Golfo? ¿Para ver cómo fundamentalistas suníes y conservadores tribales se unen para impedir las legítimas aspiraciones de las mujeres en participar total y plenamente a todos los niveles de la sociedad? No es una pregunta tonta. (...) Kuwait fue liberado, pero sus mujeres no. Y, aunque las mujeres del Golfo han hecho avances significativos en educación y empleo, en términos políticos siguen en el desierto. Kuwait tiene que volverlo a intentar. Debe hacerlo. (...) Es hora de que los estados árabes sigan el ejemplo de países musulmanes como Indonesia y Pakistán, donde las mujeres no sólo participan, sino que son líderes. Y es hora de dejar de distorsionar las enseñanzas coránicas para justificar la institucionalización de la discriminación sexual sistemática.

, 3 de diciembre