Serbia acusa a los servicios secretos franceses de intentar matar a Milosevic

La policía yugoslava arrestó hace más de una semana a un grupo de serbios a los que acusó de ser agentes de los servicios secretos franceses que preparaban un atentado contra el presidente yugoslavo, Slobodan Milosevic, según informó ayer el ministro de Información yugoslavo, Goran Matic. Según Matic, algunos de los detenidos son especialistas en atentados consistentes en embestir vehículos con camiones cargados de arena, que es como murió el cuñado del líder de la oposición liberal serbia, Vuk Draskovic, hace dos meses. Se trataría, según Matic, de serbios que cometieron atrocidades en Kosovo durante la pasada guerra en Yugoslavia y parte de ellos habrían escapado a Montenegro, la otra República yugoslava, donde estarían formando unos comandos especiales secesionistas montenegrinos. "Nuestros órganos de seguridad arrestaron a esos espías y terroristas de los servicios secretos franceses que, tras cometer una serie de atrocidades en territorio de la exYugoslavia, planeaban un atentado contra Milosevic", afirmó Matic. El ministro precisó que los cinco arrestados son serbios nacidos en zonas de la hoy extinta Yugoslavia comunista y que formaban un grupo llamado Pauk (Araña), responsable de varios asesinatos en la antigua federación.

Los detenidos fueron identificados como Jugoslav Petrusic, de 37 años; Milorad Pelemis, de 35; Branko Mlaco, de 46; Rade Petrovic, de 35, y Slobodan Orasevic, de 43 años. Maco es buscado como criminal de guerra por el Tribunal Internacional de La Haya para la antigua Yugoslavia por haber sido jefe de la cárcel de Vogosce por la que pasaron muchos musulmanes durante la guerra de Bosnia.

Los servicios secretos franceses habrían organizado la red Pauk con elementos de combate tomados de la Legión Extranjera, según el ministro Matic, que pertenece al partido Izquierda Unida Yugoslava, que preside Mirjana Markovic, esposa de Milosevic.

El grupo tenía varias alternativas para el atentado como el uso de fusiles de mira telescópica y morteros, la colocación de explosivos en el alcantarillado sobre el que tendría que pasar el coche de Milosevic e incluso introducir en su residencia un comando perfectamente adiestrado.