El PSOE no entrará en un Gobierno con el GIL en Melilla salvo que se transforme
El acuerdo suscrito entre el GIL, Coalición por Melilla y el Partido Independiente de Melilla para gobernar la ciudad de forma rotatoria ha reabierto los ataques de los principales partidos nacionales. El PSOE, además, se ha visto en un brete, ya que sus dos concejales apoyan en la actualidad al Ejecutivo de Mustafa Aberchan (CpM).El secretario de Política Autonómica del PSOE, Ramón Jáuregui, anunció ayer en Pamplona que su partido no estará en un Gobierno con el GIL, salvo si esta formación "desaparece como partido político en Melilla o se transforma en partido local, con otro corte y sin dependencias del partido padre". Sólo así, "cabe un entendimiento con el GIL". Y si no, "el PSOE abandonará ese gobierno". Precisamente, el líder del GIL melillense, Crispín Lozano, impulsó la semana pasada la reconversión localista de su formación. "El partido pasa a llamarse GIL de Melilla y aquí pierde su carácter nacional para tener total independencia para decidir". Lozano, no obstante, tampoco tiene claro que la ruptura con el GIL tenga que ser total: "Más adelante, ya veremos si hay congreso y cómo quedan las cosas; ahora nos interesa Melilla".
Los firmantes del pacto, en cualquier caso, no necesitan al PSOE para gobernar. Entre los tres suman 15 de los 25 diputados de la Asamblea. El PSOE, roto en la ciudad y dirigido por una gestora, lo sabe. "Será la asamblea la que tenga que decidir qué hacer ahora", explica Rafael Villuendas, presidente de la gestora socialista, quien comparte la postura de Jáuregui. Dicha asamblea, ya aplazada la semana pasada, se celebrará el lunes que viene.
El PP también ha reaccionado con virulencia a este pacto, sobre todo porque había mantenido contactos con el GIL y la Unión del Pueblo de Melilla (UPM) para presentar una moción de censura contra Aberchan. Incluso el portavoz parlamentario del PP de Melilla, Ignacio Velázquez, habló el miércoles con Lozano en la creencia de que la moción estaba en marcha. El líder de UPM, Juan José Imbroda, ha explicado que en esas conversaciones habían participado los tres partidos que en ese momento estaban en la oposición: GIL, PP y UPM.
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