Victoria polémica del Deportivo en el campo del Oviedo

El Deportivo sigue enganchado a la cabeza gracias a un triunfo salpicado por la polémica. El equipo gallego ejerció de aspirante a la Liga, con hechuras de grandeza pero el Oviedo volvió a sentirse maltratado por el arbitraje, esta vez en medio de un escándalo que puede costarle al club azul una sanción disciplinaria.Estos partidos reclaman la inmersión del fútbol en las nuevas tecnologías. Tal vez por encima de nuevas tácticas, lo que la buena salud del fútbol precisa son unos jueces de línea por ordenador. Como en el tenis ya suena una alarma cuando la pelota sobrepasa una línea, los balonazos a la espalda de las defensas adelantadas están reclamando el concurso de la cibernética. Ayer, en el Carlos Tartiere, desde que Esteban tuvo que salir a los pies de Makaay, después de un clamoroso fuera de juego, el partido entró en una fase de amputaciones a banderazo limpio. Los dos auxiliares del árbitro se las ingeniaron para juzgar la posición de los delanteros siempre con un criterio opuesto al del resto de la concurrencia.

En el segundo tiempo, cuando el Oviedo jugaba sus mejores minutos, el árbitro creyó llegado el momento de sumarse al carrusel de errores. Así, señaló el penalti que le dio el triunfo al Deportivo.