El Gobierno reprocha a Blanco su "precipitación" por afirmar que el incendio de Nerva fue intencionado

El subdelegado del Gobierno en Huelva, Salvador Cejudo, acusó ayer a la Junta de Andalucía de "precipitarse" al asegurar que el incendio ocurrido en la madrugada del pasado jueves en el vertedero de seguridad de Nerva fue intencionado. Cejudo se refirió a las declaraciones realizadas en los últimos días por el consejero andaluz de Medio Ambiente, José Luis Blanco, y por la empresa gestora del vertedero de Nerva, Complejo Medioambiental de Andalucía (CMA), y dijo que "se precipitaron al no esperar a que concluyese la investigación policial" sobre el siniestro. En su opinión, Blanco "se pilló los dedos" al decir que en la noche del incendio se produjo un fallo en la seguridad del vertedero de residuos tóxicos y peligrosos ya que la supervisión de este tipo de instalaciones es competencia de la Junta de Andalucía. El fuego se inició a las 5.30 de la madrugada del jueves en el depósito de residuos especiales, donde se almacenan materiales altamente contaminados, tales como bidones para el transporte de residuos. Efectivos de la planta y de los bomberos sofocaron el fuego con arena en tres horas. Tanto el gerente de CMA, Santiago Ortíz, como Blanco aseguraron el jueves que existían sospechas de que el incendio era intencionado con el argumento de que las temperaturas eran bajas esa noche y la consiguiente dificultad para que los productos químicos ardiesen de manera espontánea. La empresa ha presentado una denuncia ante la Guardia Civil por esta causa e insinuó la relación entre el fuego y el cuarto aniversario de las protestas de la Plataforma Antivertedero. Por su parte los contrarios al depósito de residuos, que rechazaron las acusaciones de forma tajante, reclamaron ayer a Medio Ambiente la apertura de una investigación y la paralización de la instalación durante la misma. Por su parte Ecologistas en Acción presentó ayer una denuncia por un presunto delito medioambiental y negligencia de CMA en la gestión de los residuos tóxicos y peligrosos, ya que mantienen que el fuego se inició por el contacto entre sustancias que deberían haber estado separadas y aisladas.