Núñez: "Lo más duro ha sido la ingratitud de nuestro entorno"

El abrazo entre lágrimas de Josep Lluís Núñez y Nicolau Casaus nada más finalizar el partido reflejó el sentimiento de la directiva barcelonista, radiante de felicidad. Tuvo ayer una numerosa representación en el palco de Mendizorroza, encabezada por su presidente, que, en contra de lo habitual, esta vez se desplazó. Minutos después, en declaraciones a La 2 y la COPE -se negó a hablar con cualquier otro medio de comunicación-, Núñez arremetió contra quienes han sido críticos hacia su gestión a lo largo de la temporada. "Lo más duro", aseguró, "ha sido la poca gratitud de nuestro entorno, que ha hecho una crítica destructiva aun cuando ganábamos. Pero cuanto más difícil me lo pongan, más difícil les va a resultar. Si quieren guerra, la van a tener".Los cuatro títulos de Liga obtenidos en fútbol, baloncesto, balonmano y hockey sobre patines fueron valorados por el presidente barcelonista como el "reflejo de un trabajo serio". Y después de explicar que no quiso viajar con el equipo -lo hizo con otros directivos en un vuelo diferente- para dar una impresión de normalidad, volvió a referirse a los malos momentos vividos: "Ha sido una temporada muy difícil porque había un gran interés en que el proyecto no continuase". Hablaba del mes de noviembre, cuando el Barça sufrió cuatro derrotas consecutivas y el Camp Nou pidió la cabeza de Van Gaal y la dimisión de Núñez. "Aquel momento no era normal. Hablé con el entrenador y luego hicimos una terapia con todos los jugadores, uno por uno. Los jugadores comprendieron que todos perdíamos y todos ganábamos", dijo ayer el presidente del Barça.

Preguntado también sobre la firma de los contratos para el nuevo canal de televisión del club y sobre las difíciles relaciones que ha mantenido con algunos estamentos políticos, Núñez indicó: "La grandeza es nuestra independencia. El Barça representa a un país. Soy transparente y ante todo defiendo al Barça".