Barberá pretende que Valencia reciba los beneficios de un municipio turístico

Rita Barberá presentó ayer el programa electoral del PP para la ciudad de Valencia arropada por todo el equipo del gobierno municipal. La alcaldesa ofreció un documento "estéticamente bello" que recoge hasta 319 líneas de acción a desarrollar durante la próxima legislatura si recibe la confianza mayoritaria de los ciudadanos. Entre las diversas iniciativas, el PP pretende que Valencia logre la consideración de municipio turístico para poder obtener los beneficios previstos en la legislación autonómica para aquellas poblaciones cuya población de hecho desborda el número de ciudadanos de derecho. Barberá apostó por el turismo de congresos y ferias; por una mejora de los servicios de restauración en todos los niveles; y por potenciar la ciudad de Valencia como destino del turismo de cruceros. La alcaldesa aseguró haber logrado, desde la presidencia de la Federación Española de Municipios y Provincias, "una importante mejora" de la participación de las corporaciones locales en los ingresos del Estado, que no cuantificó, y que le permitirá congelar la presión fiscal que soportan los ciudadanos. Y anunció que luchará por una mayor dotación para los municipios desde los gobierno regionales, que desborde las actuales transferencias de carácter finalista. Barberá aseguró que revisará el Plan General de Ordenación Urbana, vigente desde hace diez años, para adaptarlo a los nuevos reglamentos y revisar al alza las dotaciones de los diversos barrios y la proporción de zonas verdes hasta un 7%. La alcaldesa evitó ser explicíta al respecto, pero aseguró que "no habrá más rascacielos ni más suelo urbanizable". También anunció una remodelación del gobierno municipal para reducirlo a siete áreas: urbanismo; obras e infraestructuras; medio ambiente; economía y hacienda; cultura, deportes, ferias y Palau de la Música; administración general; y bienestar social y seguridad ciudadana.