La Sierra de Huelva sufre la amenaza de la presión urbanística

La Sierra de Huelva sufre una presión urbanística agobiante. Ésta es una de las principales conclusiones de las Jornadas de Urbanismo en Espacios Naturales Protegidos, que ayer se celebraron en Fuenteheridos (Huelva), organizadas por la Junta de Andalucía y a las que asistieron unos 25 alcaldes de la zona. "Hay que buscar una estrategia común para el desarrollo de los parques naturales. Se han de poner de acuerdo las instituciones y los agentes privados", manifestó el presidente del Parque Natural Sierra de Aracena y delegado de la Junta, Juan Ceada. El Parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche es el segundo en extensión de Andalucía, con 184.000 hectáreas, detrás de la reserva jiennense de Cazorla. En su entorno hay 28 pueblos con 41.000 habitantes, localidades pequeñas, en muchos casos de 200 o 300 vecinos. Muchos de esos municipios carecen de planes generales de urbanismo, por lo que las construcciones crecen anárquicamente en su entorno. La directora general de Urbanismo y Ordenación del Territorio de la Consejería de Obras Públicas, Josefina Cruz, dijo ayer: "Es prioritario que a las localidades débilmente pobladas, como las de la Sierra de Huelva, se les dote de planeamientos urbanísticos".