Un niño de Canadá demanda a su madre por las secuelas de un accidente que sufrió antes de nacer

El Tribunal Supremo de Canadá ha comenzado a estudiar un caso inédito que puede provocar una cascada de demandas si se resuelve en favor de quien lo ha planteado. Un niño ha demandado a su madre, a través de su tutor legal (su abuelo materno), por el daño que le provocó un accidente de tráfico cuando él era todavía un feto.Aquel accidente provocó su nacimiento prematuro y una parálisis cerebral. El niño, de cinco años, pide a su madre -con la que sigue viviendo- una indemnización por los daños provocados por su infracción de tráfico.

En marzo de 1993, Cynthia Dobson, embarazada de 7 meses, sufrió un accidente de tráfico en Canadá en medio de una tormenta de nieve. Unas horas después su hijo nació de forma prematura. Por culpa del accidente, el bebé sufrió daños físicos y mentales que derivaron en una parálisis cerebral permanente. La investigación policial determinó que Dobson conducía a excesiva velocidad y de forma temeraria.

En enero de 1997, un tribunal estableció que cualquier niño tiene la capacidad legal de presentar una demanda contra su madre si existe una negligencia en el cuidado del feto durante el embarazo. La sentencia fue confirmada por un tribunal de apelaciones unos meses después.

En función de esa sentencia, el niño pide ahora que su madre sea declarada responsable civil de su estado físico. El caso acaba de llegar al Supremo. En octubre de 1997, este tribunal rechazó el reconocimiento de los derechos legales del feto. En aquel caso una mujer había sido demandada por no someterse a un tratamiento de desintoxicación de drogas cuando estaba embarazada. Si la acusación prospera, las asociaciones anti aborto tendrían un argumento legal para defender que el feto debe considerarse jurídicamente como una persona desde su fecundación. Los grupos feministas creen que si la demanda triunfa puede iniciarse una persecución contra las madres que, por ejemplo, fumen o no sigan una dieta correcta