"Hay mucho humor en "L"illa de l"holandès", avanza Torrent

L"illa de l"holandès, la novela que Ferran Torrent tiene previsto publicar el próximo octubre, transcurre en una isla imaginaria situada frente a una ciudad que podría ser Valencia y junto a un país en el que hay una dictadura. "Estamos en 1968 y un profesor marxista es confinado a esta isla por un periodo de cinco años", explica Torrent. "Es una isla desolada, de pescadores, que está cerca de donde vive pero a la que nunca le ha apetecido ir. A partir de aquí, nacerá una relación con otros personajes y el profesor se dará cuenta de que su concepto de libertad es algo de manual, muy alejado de la libertad que se vive en la isla". Como contrapunto al confinamiento, Torrent ha urdido una trama en la que un inspector busca el rastro de un atracador. Insiste Torrent en que hay mucho humor en L"illa de l"holandès, un humor que parte a menudo de los diálogos que mantiene el profesor con otros cinco personajes de la isla: el alcalde pedáneo, un doctor expedientado, un belga que lleva un hotel, un guardia civil y un sordomudo. "El conjunto es como una microsociedad", explica, "en la que se ve cómo el profesor va evolucionando hacia una idea de libertad más abierta".