Industria y Seguridad Nuclear discuten sobre la chatarra

Los efectos de la nube radiactiva que afectó al sur de Europa a principios de junio han llegado ya a los despachos del Ministerio de Industria. El presidente del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), Juan Manuel Kindelán, se reunió ayer con el secretario de Estado de Energía y Recursos Minerales, Nemesio Fernández-Cuesta, para estudiar medidas de control sobre la importación y el reciclado de chatarra por las acerías españolas, una actividad que carece ahora de garantías suficientes contra la contaminación radiactiva.Kindelán informó al secretario de Estado sobre las medidas que proponen los expertos del CSN. La principal es obligar a las acerías a instalar pórticos detectores de radiactividad a la entrada de sus factorías. Actualmente sólo cuatro de las catorce grandes empresas del sector disponen -voluntariamente- de esos sistemas de seguridad.

En los últimos diez meses, las factorías de Acerinox y Sidenor han detectado cinco partidas de chatarra importada contaminada con residuos nucleares incontrolados. Una de ellas pudo ser la causante de la fuga de cesio radiactivo que se extendió por Europa en junio, pero no hay evidencias.

El Ministerio de Industria ha anunciado para septiembre un borrador legal sobre el traslado e importación de chatarras. De prosperar las propuestas del CSN, el proyecto de ley impondrá (además de los arcos detectores) pólizas de seguros obligatorias para cubrir los gastos de descontaminación. También obligará a los intermediarios del sector a formalizar un registro donde conste si la chatarra proviene de una fuente doméstica, hospitalaria o industrial.