El funeral del asesinado en Tejas une a la comunidad negra de EE UU

Más de un millar de personas, entre ellas varios dirigentes de la comunidad negra norteamericana, asistieron el sábado en Jasper (Tejas) al funeral de James Byrd, el autoestopista negro de 49 años salvajemente asesinado la semana pasada por tres blancos. El acto se convirtió en un llamamiento pacífico a la igualdad y al fin de la violencia contra las minorías en Estados Unidos. Sin embargo, en la pequeña localidad, situada a 160 kilómetros al noroeste de Houston, se vieron también militantes armados del partido denominado Nuevas Panteras Negras. Los gastos del funeral fueron sufragados por el jugador de baloncesto de los Chicago Bulls, Dennis Rodman.La presencia del reverendo Jesse Jackson, el alcalde de Houston, Lee Brown, y otros líderes negros sirvió para que se hiciera un llamamiento al presidente Bill Clinton y al Congreso, controlado por los republicanos, para buscar soluciones reales al aumento de los crímenes raciales que se registran en EE UU. «Cuando ocurre una tragedia como ésta, los negros son por lo general quienes están de luto y encolerizados. Pero en esta ocasión, negros y blancos se han reencontrado y tratan de que este drama sirva como triunfo (de las relaciones raciales)», declaró Jackson. El secretario de Transportes, Rodney Slater, leyó un mensaje de condolencia del presidente dirigido a la familia de la víctima.

El asesinato de Byrd, que fue golpeado y arrastrado varios kilómetros atado a una camioneta para terminar decapitado y descuartizado, ha provocado gran indignación en todo el país. Los tres presuntos culpables, delincuentes de 23, 24 y 31 años, fueron acusados el pasado martes de asesinato premeditado, que en Tejas se castiga con cadena perpetua. Dos organizaciones racistas, el Ku Klux Klan y la Nación Aria, han desmentido que los homicidas formaran parte de sus agrupaciones, como sugirió la policía en un principio.

Entretanto, Clinton ha advertido a sus compatriotas de que deben prepararse a vivir en un país donde ninguna raza o etnia será mayoritaria y ha pedido a los nuevos inmigrantes que adopten la cultura de esta nación. El presidente dedicó su última alocución radiofónica sabatina a las relaciones entre las razas, para marcar el primer aniversario del lanzamiento de una iniciativa suya para promover la armonía interracial, que aún está en la fase de estudio de la situación.