Manifestación en Crevillent por los vertidos de Spumatex

El Día Mundial del Medio Ambiente fue aprovechado ayer por un grupo de ecologistas y vecinos de Crevillent para manifestarse en contra de los vertidos de lodos tóxicos por parte de la empresa Spumatex. Convocados por la Coordinadora de Organizaciones de Defensa Ambiental (CODA), los manifestantes repartieron octavillas frente a la fábrica y recorrieron el centro de la localidad de la Vega Baja. La empresa fabrica plantillas de goma para calzado. Los lodos resultantes del proceso productivo contienen -según los datos de una analítica realizada por Aguas de Alicante por encargo de los vecinos que viven en las inmediaciones de la factoría- tolueno, sileno y etil-benceno. "Productos muy peligrosos y, en el caso del tolueno, altamente cancerígenos", explicó el delegado de la CODA en Alicante, Francisco Soler. En un principio, los vertidos se realizaban en una balsa situada en el patio posterior de la fábrica, donde los lodos quedaban almacenados sin que existiera ningún tipo de vallado. Este año, la empresa ha optado por solidificar los residuos y mezclarlos con tierra, opción que no impedía ayer que los montones de cieno despidieran un hedor nauseabundo. "En sus diez años de existencia, la empresa ha recibido un rosario de denuncias", aseguraron los ecologistas. Los 19 vecinos que residen en los alrededores denunciaron en un juzgado de Elche a Spumatex a finales el año pasado. Ahora han abierto una cuenta para pagar la fianza de 100.000 pesetas por vecino que les demanda el juez para poder volverse a personar en la causa, después de que los retirara del caso el 6 de febrero. Vecinos y ecologistas coincidieron en denunciar "la connivencia" del Ayuntamiento de Crevillent con la empresa, escudado en la defensa de los puestos de trabajo.