Apasionada

Paula Cole tiene a su favor la enorme sinceridad que se revela en lo que hace y el siempre atractivo timbre del piano acústico que la acompaña. También cuenta con el apoyo de un carismático batería, Jay Bellerose, cuyo modo de aporrear -decir tocar sería quedarse francamente corto- los tambores define en gran medida el resultado final de la música de Cole.Cole presentó las canciones de su disco This fire, unos temas en los que la emoción a cargo de la intérprete alcanza cotas tremendamente elevadas. Paula Cole tiene una poderosa voz que sabe, además, manejar: modulándola desde la suavidad melódica más sutil o haciendo. que se imponga sobre el resto de los instrumentos utilizando el grito más lacerante.

Por contra, las canciones resultan en directo algo tediosas, sobresaliendo por su interés Hitler's brothers y su sencillo de más éxito I dón't want to wait. Al final del concierto, la cantante se colocó un frívolo pelucón rubio y un marabú de plumas para emular a la glamourosa Grace Jones, en una divertidísima recreación del clásico de Edith Piaf, La vie en rose. Fue, sin lugar a dudas, lo mejor del concierto. Lo más divertido, cosa que da qué pensar.