Prudencia obliga

La inminencia de la publicación del dato de inflación en agosto, que se conocerá el viernes, y la próxima subasta de certificados del Banco de España, el lunes, ha insuflado prudencia en los operadores españoles, que han limitado el negocio bursátil a 55.559 millones de pesetas. Ello demuestra, por otra parte, que nadie está dispuesto a vender a cualquier precio. La Bolsa de Madrid, con buen fondo pero con poco dinero disponible, cedió un 0,70%, para situarse en 589,72 puntos, mientras que el Ibex hacía lo propio y perdía un 0,76%, al cerrar a 6.745,67 puntos. Similar comportamiento registraron los demás mercados europeos. Londres retrocedió un 0,91%, París un 1,55% y Francfort un 1,87%.Y es que los últimos datos sobre crecimiento económico en Alemania han vuelto a poner sobre el tapete la posibilidad de una subida de tipos por parte del Bundesbank. También la apertura negativa de Wall Street influyó en el comportamiento de los mercados europeos. Al cierre, Dow Jones cayó un 1,7%.

La peseta, por su parte, ganó cuatro céntimos frente al dólar (152,259) y seis frente al marco (84,34),mientras que la rentabilidad del bono español de referencia se mantenía en el 6,18% (igual que el martes), aunque el diferencial con el bund alemán empeoraba a 0,54 puntos.