La FEF recuerda a Lendoiro que continúa inhabilitado

La Federación Española de Fútbol (FEF) y el Deportivo vuelven a las escaramuzas. La causa ha sido en esta ocasión una carta del presidente del club gallego, Augusto César Lendoiro, al organismo federativo para comunicarle que su equipo no podrá contar el próximo domingo con ocho futbolistas y sugerirle la posibilidad de suspender el partido contra el Extremadura, que se juega la permanencia en la Primera División.La federación respondió ayer de modo fulminante: ni siquiera entró a estudiar el escrito, ya que estaba firmado por Lendoiro y éste fue inhabilitado por la FIFA el pasado 10 de febrero.

Desde que Lendoiro plantó cara a la FIFA para reclamar su derecho a acudir a la justicia ordinaria, el Deportivo se ha convertido en la bestia negra federativa. Si el presidente del máximo organismo del fútbol español, Ángel María Villar, y su secretario general, Gerardo González, no pierden ocasión de lanzarse contra Lendoiro, éste tampoco desaprovecha cualquier oportunidad para meter en apuros a sus antagonistas.

El último enfrentamiento se abrió el pasado miércoles, cuando el Deportivo se dirigió a la federación para comunicarle que el domingo no podrá disponer de ocho futbolistas: Mauro Silva, Flavio Conceigao, Naybet y Songo'o, convocados con sus respectivas selecciones; el joven Deus, que disputa con el combinado español el Mundial sub 20; Martins y Fran, lesionados, y Nando, sancionado.

Alineación titular

Aunque Augusto César Lendoiro no pedía directamente la suspensión del encuentro contra el Extremadura, esgrimía el artículo 100 de sus estatutos, que prevé sanciones para los equipos que presenten de modo deliberado una alineación titular "notoriamente inferior a la habitual", y urgía al organismo federativo a que tomara una decisión en consecuencia con las normas.Al mismo tiempo, Lendoiro advirtió públicamente de la precaria situación de su plantilla ante las posibles suspicacias de Celta y Rayo Vallecano, rivales directos del conjunto de Almendralejo en la lucha por la permanencia. Desde hace tiempo, el presidente deportivista ha multiplicado sus quejas por los perjuicios que la causan las constantes llamadas a los futbolistas extranjeros, en especial los brasileños, para jugar con sus respectivos equipos nacionales.

La federación ni entró a considerar la petición de Lendoiro y a las 14.45 horas de ayer envió un escueto fax de cinco líneas al Deportivo en el que le recordaba que su presidente, aunque siga ejerciendo en público como tal, está inhabilitado por la FIFA.