Magistrados del Supremo, en, contra de que el Rey medie sobre el Estatuto

Magistrados del Tribunal Supremo han mostrado sus discrepancias con la decisión adoptada el pasado día 11 por el pleno de ese tribunal de pedir la mediación del Rey para lograr la aprobación de su Estatuto, que equipararía su salario al de los magistrados del Tribunal Constitucional y establecería incompatibilidades para los jueces del Supremo.El magistrado de la Sala de lo Penal de este tribunal Ramón Montero aseguró ayer a Efe que esa postura discrepante la mantienen, además de él, la mitad de los 90 magistrados del alto tribunal, entre ellos su compañero de Sala Gregorio García Ancos y el presidente de la Sala de lo Militar, José Jiménez Villarejo. Estos ven "muy mal" recurrir al Rey y también consideran negativo la comparación con el Tribunal Constitucional.

Los discrepantes, según Montero, no fueron partidarios del procedimiento seguido el pasado día 11, "porque un magistrado del Supremo, ni un juez en general, no puede hacer algo propio de un sindicato, como pedir un aumento de sueldo". Aunque estos magistrados consideran razonable la petición de incremento salarial, apuestan por otros medios para solicitarlo, como, por ejemplo, que sea el presidente del Supremo, Javier Delgado, quien realice "solo y sin plenos oficiales" gestiones con el Ministerio de Justicia tras consultar con los magistrados.

"Error fuera de lugar"

El portavoz de la Asociación Profesional de la Magistratura, José Luis Requero, cree también que aunque es "necesaria una justa dignificación" de los magistrados del Supremo es un "error fuera de lugar" invocar la Figura del Rey para conseguirla.Para Requero, lo "principal" es que se reconozca una posición institucional y una retribución digna, "siendo lo de menos si ésta es igual a la del Tribunal Constitucional".