Pindado niega que en la UCIFA se pagara con droga a confidentes

El comandante José Ramón Pindado, uno de los encausados en el caso UCIFA, que investiga la corrupción en la Unidad Antidroga de la Guardia Civil cuando el director general era Luis Roldán, negó ayer en su declaración en la Audiencia Nacional que en dicha unidad se pagara con droga a los confidentes ante la tardanza con la que llegaban los fondos reservados. Pindado, para quien el fiscal pide 16 años de cárcel por un delito contra la salud pública y otro de falsificación, aseguró que, mientras él fue responsable de la UCIFA, esos pagos no tuvieron lugar.

Pindado, sin embargo, sí admitió que, como las partidas reservadas con las que se pagaba a los confidentes llegaban de forma lenta y escasa", se decidió que podía ser "lícito y legal" que los colaboradores o confidentes pidieran dinero a los narcotraficantes por ayudarles a introducir droga. Las cantidades obtenidas de esta forma se las quedaban los confidentes como "premio" a su colaboración con las fuerzas de seguridad.

"De esta manera, por un lado se les hacía más daño a los narcos y también se quitaba dinero de la droga, y así no había que sacarlo de los fondos reservados", señaló.

Sin embargo, durante el interrogatorío se puso de manifiesto que el dinero entregado por la Caja Postal, cuya entrega a los narcotraficantes como pago de cocaína debía ser controlada, terminó, por lo menos en una ocasión, en manos de los delincuentes.

Dos horas de declaración

El comandante, que declaró durante cerca de dos horas ante el fiscal Javier Zaragoza y continuará haciéndolo el próximo viernes, defendió que en todas las solicitudes de dinero para comprar droga, en operaciones dirigidas a saber "la forma de operar de los narcotraficantes", se partió de autorizaciones judiciales tras consultar a la Fiscalía Antidroga.El fiscal, ante la dificultad del comandante José Ramón Pindado para concretar a qué tramas de distribución de cocaína en España se quería seguir la pista mediante compra de cocaína a narcotraficantes colombianos, señaló que "en los oficios" de la Guardia Civil se habla de "organizaciones" pero éstas luego "no aparecen".

"Da la impresión", continuó Zaragoza, de que las alusiones a tramas de narcotráfico en España se utilizan como "cobertura" para otros fines, y destacó que no puede decirse "que hicieran nada" para averiguar quiénes componían esas supuestas organizaciones.

El acusado, que no recordaba la cantidad exacta de cocaína (30 o 35 kilos) con la que se traficó en la llamada Operación Hotel Foxá, que dirigió él personalmente, aceptó que durante la operación se produjo alguna detracción de droga, pero negó haber tenido conocimiento de la misma a tiempo de evitarla.