REFRESCO AÉREO

"Refrescante" es la clave de la última campaña publicitaria de la compañía aérea suiza Swissair para la televisión. Pero para ilustrarla no aparece una bebida burbujeante, sino la cara -o, mejor dicho, la boca refrescante- de su director general, Philippe Bruggisser -especialmente célebre por la cura de adelgazamiento en términos de recorte de empleo a que ha sometido a la compañía-, que no tiene reparo en abrirla en la silla del dentista ante la cámara que se le mete hasta por los orificios nasales, momento en que aparece el eslogan en la pantalla que reza: "Swissair, la compañía más refrescante". Aparentemente, ninguno de sus colaboradores esperaba un gesto así de su jefe. "Es realmente refrescante", dicen, como tampoco ninguno de los patrones de las grandes empresas suizas se prestaría a protagonizar un anuncio publicitario similar. Para la responsable de comunicación de Swissair, MarlIse Leinauer, el otro objetivo es que los empleados acepten al jefe como a un ser humano, y no como a un contable y un exterminador de empleos, su imagen aparentemente más conocida.-