Djordjevic redime al Barça

El flamante regalo de Reyes hecho por el Barcelona a todo buen aficionado al baloncesto, el fichaje del serbio Alexander Djrdjevic, comenzó ayer en Sevilla a expiar los pecados de un conjunto que, deambula esta temporada con unos altibajos indignos de una plantilla de tal relumbrón. El Caja San Fernando hizo lo que pudo. El equipo de Petrovic aún tiene mucho que decir entre los grandes.En la pugna de los dos pequeños grandes hombres que avivó el morbo de este encuentro entre el segundo y tercer clasificados de la liga ACB, el base local Anderson le ganó la batalla personal a Djordjevic a base de mareantes estadísticas, pero el serbio templó a su equipo como los ángeles y lo elevó a los. altares del triunfo en un partido que se inició estresado y pidiendo a gritos una buena dosis de 'tila.

El choque se inició tan loco como desordenado. El Caja San Fernando jugaba a gusto en el primer tiempo. Los rebotes eran suyos. 41 en total; 16 ofensivos. El Barça, todo lo contrario: sólo 4 ofensivos de 28 rechaces capturados. Djordjevic surgió desde más allá de la línea de 6,25 metros como lanza de avanzadilla del remonte a ocho minutos del descanso. Los visitantes tomaron la iniciativa en el marcador y ya no la abandonarían hasta el final. Karnisovas se unió a la fiesta anotadora. Frank se fue con tres faltas al banquillo y Dueñas organizó la situación. Para colmo, técnica al entrenador cajista que disparó la ventaja visitante hasta los 13 puntos. Con el clima enrarecido, el Caja chocaba sin quererse dar cuenta de ello en el desatino de su tiro exterior, única baza que intentaba. La segunda mitad partió con los mismos bríos. Los locales volvían con la consigna no aprendida de machacar a triples: 5 en 22 lanzamientos. La labor reboteadora de Arranz, Romero y Frank ayudó a que se asomaran al empate (50-51). Djordjevic pedía tranquilidad. Revivió en ese instante, con un triple colado tras lanzar casi tirado por los suelos, esa final europea de hace unos anos que muchos retienen en la memoria. El efecto acordeón del marcador se repetía con frecuencia. El Barça siempre por delante. Xavi Fernández se homenajeó con tres triples consecutivos. El Barcelona quedó perdonado y el Caja San Fernando, confirmado.