La mayor retrospectiva de Kounelis se presenta en el Museo Reina Sofía

La retrospectiva más completa del artista italiano de origen griego Jannis Kounellis (1936) se presenta hoy al público en el Museo Nacional-Reina Sofía, de Madrid. 20.000 kilogramos de carbón de las cuencas de León, 250 litros de ginebra de garrafa y un guacamayo vivo son algunos de los materiales empleados en el medio centenar de piezas de los últimos 30 años. "No soy un partisano de la modernidad. Soy un hombre antiguo y un artista moderno declara Kounellis. La muestra ha costado 50 millones de pesetas y gran parte de los objetos utilizados se han alquilado.

El carbón volverá a Ponferrada, la ginebra se disolverá en el espacio y la especie de papagayo encontrará a su dueño cuando la exposición de Kounellis se clausure en el Reina Sofía el 18 de febrero. El alquiler habrá terminado también para las grandes vigas de madera y los sacos de yute con habichuelas rojas y blancas, café, maíz, lentejas y arroz. Varias piezas incorporan fuegos encendidos con bombonas de gas, que el público no verá por motivos de seguridad."Nunca he entendido lo que es un material artístico", declara Kounellis. "El artista transforma los materiales, los formaliza. El material está ligado a la visión de la historia". El empleo de estos materiales y otros -como carne o láminas de oro- ya estaban en las manos de Kounellis antes de fijarse como tendencia el arte povera. La exposición comienza con cuadros de los años sesenta, con letras y números. "La centralidad del cuadro no era creíble y buscamos una salida del cuadro, una nueva credibilidad más amplia y más dialéctica. El empleo de otros materiales, desde los comienzos con el carbón, demuestra otro tipo de artista y de espacio. Soy un artista pintor. Es mucho más cercano a un artista medieval que al impresionismo".

Kounellis no sé considera un pintor ideológico. "Masaccio es ideología, Caravaggio es ideología. Es una palabra que se ha cargado de situaciones diversas en el arte. El humanismo es ideológico. Profundamente, soy un humanista". Tampoco tiene la intención de provocar. "Lo hago todo con la máxima normalidad, con reflexión y con precisión, nunca con voluntad de provocar. Las vanguardias -tienen aspectos excepcionales, como la radicalidad, pero el problema del artista continúa siendo simple y constante: el problema de quién es y adónde va. Suelo decir que soy un hombre antiguo y un artista moderno".

Para la comisaria, Gloria Moure, directora del Centro Gallego. de Arte Contemporáneo, Kounellis se siente contemporáneo pero está unido al Renacimiento y al Barroco.

Su obra es universal y sólidamente enraizada en la historia y el drama humano, en el Mediterráneo y en Europa". La metamorfosis, la fragmentación, la musicalidad, lo sagrado, la religión, son algunas constantes en la obra de Kounellis,