Giuseppe Panini, creador de los célebres cromos

Ha sido llamado el rey de los cromos, porque, conquistando a los niños de al menos 40 países, tras dominar prácticamente el 100% del mercado italiano, logró que su apellido, Panini, evocara en todo el mundo las colecciones de futbolistas, ciclistas y otros divos del deporte que hoy, en la era de la informática, siguen representando un consumo tan de moda como cuando las modestas versiones radiofónicas de Diego Valor constituían el único aliciente a la salida del colegio. Giuseppe Panini, fundador del imperio editorial que lleva su nombre, falleció el pasado viernes en Módena, a los 71 años.Era un rico jubilado, dedicado al cuidado de su extraordinario Museo del Cromo, desde que, en 1986, vendió la sociedad al grupo de Robert Maxwell. Comenzaron allí los peores años de Cromos Panini, que hubo de ser rescatada por un grupo de editoriales italianas encabezadas por De Agostini. Hoy, Cromos Panini es propiedad del grupo norteamericano Marvel, y representa de nuevo un saneado negocio con más de 500 empleados, que factura unos 450.000 millones de liras (cerca de 40.000 millones de pesetas) cada año.

Los orígenes de Panini fueron mucho más modestos. Llegado a Módena desde un pueblo vecino, Maranello, para trabajar como obrero, Giuseppe Panini puso hacia 1954, con su hermano Benito, un quiosco junto a la catedral para vender la Gazzetta dello Sport. Probaron a ofrecer bolsas-sorpresa, con tebeos y otros artículos que se habían quedado anticuados, y tuvieron éxito.

El triunfo llegó en 1960, cuando vendieron en bolsitas una colección de cromos de fútbol comprada en Milán a una editorial que había fracasado en el intento de distribuirla por otros medios. En 1961 imprimieron su primer álbum de futbolistas. En 1963 se incorporó a la sociedad Umberto Panini, el hermano emigrado a Venezuela, que era mecánico y desarrolló una tecnología propia para la edición de cromos.

Con el tiempo, a las colecciones de cromos de fútbol se sumaron las de Supermán o Sandokán, que llegó a ser el primer producto, o la de Animales en vías de extinción, que le valió a Giuseppe Panini un premio del World Wild Foundation (WWF). El deporte sigue siendo, sin embargo, la actividad más asociada al nombre de Panini, patrón, además, de un triunfador equipo de voleibol. Por todo ello, Módena le venera tanto como a Pavarotti, su otro hijo conocido en todo el mundo.-