Lauren Bacall: "Las actrices tenían antes más poder"

Howard Hawks, el hombre que la descubrió hace más de medio siglo en Tener y no tener y la lanzó en Hollywood, sigue siendo el director que prefiere, aunque también le gusta mucho John Huston. Lauren Bacall fue anoche la estrella en la gala inaugural de la Mostra de València-Cinema del Mediterrani, un festival que proyectará como homenaje su filme Escrito sobre el viento, dirigido en 1956 por Douglas Sirk.

"Las actrices tenían más poder que ahora", dijo ayer Bacall. "Quizás los salarios no fueran tan buenos, pero tenían más poder". "Para mí sólo existe el presente", contestó a una pregunta sobre los sentimientos que le produce su impresionante biografía, y añadió que sigue "egoístamente" pensando en su futuro.

A los 72 años, Lauren Bacall despliega una arrolladora simpatía y utiliza su conocida mirada con una picardía alejada de la imagen enigmática que la ha caracterizado en la pantalla. Prefiere no hablar mucho de Humphrey Bogart, de quien señala: "Me casé con él, ¿qué más puedo decir?". Y añade acto seguido: "Es una estrella que permanecerá siempre. Todas las generaciones le recordarán".

Hace una mueca cuando le preguntan si una figura como ella puede escoger los guiones que le interesan. "Tendría suerte si pudiera elegir. Procuro escoger cosas de calidad". Las tres últimas películas que ha rodado tienen, en su opinión, el suficiente interés. La más reciente es Le jour et la nuit, dirigida por Bernard Henry-Levy y con Alain Delon y Francisco Rabal de compañeros en el reparto. Con Paco Rabal, que ayer estaba también en Valencia para asistir al estreno de Tranvía a la Malvarrosa, ha "disfrutado" y te parece una persona maravillosa.