Un Juzgado pide datos sobre las escuchas a Íñigo Iruin ordenadas por Bueren

El Juzgado de Instrucción número 2 de San Sebastián ha dirigido un exhorto al juez Javier Gómez de Liaño en el que le solicita que le envíe todos los datos relativos a la intervención de los teléfonos del despacho de abogados del colectivo Berdin, en la calle de Ramón María Lilí, de San Sebastián, en el que trabaja el ex senadór de Herri Batasuna, áigo Iruin.Las escuchas telefónicas del despacho de Iruin fueron acordadas por -el juez Carlos Bueren cuando era titular del juzgado central de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional y se prolongaron entre noviembre de 1991 y agosto de 1993. En aquella época Iruin era senador y por tanto aforado, por lo que según fuentes jurídicas, las escuchas debería de haberlas acordado un juez del Tribunal Supremo y no uno de la Audiencia Nacional, pues carecía de competencias para ello.

Iruin se enteró casualmente de que su teléfono estaba intervenido cuando, en el juzgado de. Bueren, estudiaba un sumario que afectaba a un cliente suyo. El ex dirigente de HB solicitó personarse en las actuaciones, pero Bueren rechazó la petición. A continuación, Iruin presentó una denuncia en un juzgado de instrucción de San Sebastián, que archivó el caso. El abogado recurrió la decisión y la Audiencia donostiarra ordenó al juzgado la reapertura del caso y que investigase lo ocurrido en relación con las escuchas.

En cumplimiento de esa resolución, el juzgado ha requerido a Gómez de Liaño los datos que obren en la causa sobre las intervenciones telefónicas a Iruin. El letrado ha intentado personarse en el proceso, pero Gómez de Liaño no se ha pronunciado al respecto todavía.

El magistrado ha pedido al fiscal Ignacio Gordillo que le informe sobre si debe remitir copia de las escuchas o no, así como si debe admitir la personación del ex senador.

Iruin espera tener en su poder la documentación sobre las intervenciones telefónicas para presentar una querella contra Bueren, según declaró el pasado mes de abril. En caso de que ésta se presentase la competencia sería de un juzgado de instrucción, y no del Tribunal Supremo, como habría correspondido en el caso de que Bueren no se hubiese apartado temporalmente de la carrera judicial.