El PP considera que el acuerdo "será bueno para la pacificación"

Por encima del contenido, la dirección del PP considera un avance muy importante la vinculación del PNV al futuro Gobierno y a la mayoría parlamentaria que lo va a sustentar. Jaime Mayor Oreja se remonta al debate constitucional para subrayar que el "problema vasco" en buena parte se debe al "desencuentro" y a la frustración de los intentos de vincular al nacionalismo de Euskadi mediante pactos, con la excepción de los de ámbito exclusivamente vasco, el Estatuto de Gernika y el de Ajuria Enea.

Aunque durante la negociación no se ha abordado la política de pacificación, porque según populares y peneuvistas corresponde a foros de diálogo más amplios como los pactos de Ajuria y Madrid, Mayor Oreja está convencido de que el acuerdo con el PNV será "muy beneficioso" para el País Vasco y para toda la sociedad española, también en el campo de la pacificación.

El acuerdo PP-PNV va a ser recibido por el entorno político de ETA "con enorme desagrado", pronosticó el vicesecretario general del PP, "porque los violentos quieren desacuerdo entre los partidos democráticos". En cuanto al PNV, es obvio que esperan que la llegada de los populares al Gobierno les obligará a flexibilizar y limar sus criterios de dureza sobre la lucha contra ETA de etapas anteriores.

Diálogo fácil

El acuerdo previo entre los dos partidos, además, facilitará el diálogo entre policías, instituciones y Gobiernos, según el criterio del virtual ministro del Interior de Aznar, que sin embargo eludió ayer pronunciarse sobre cuestiones relacionadas con el citado departamento y dijo que desde ayer sólo habla en condición de "ex negociador" con el PNV.Desde un punto de vista más general, los populares han superado un reto al que conceden gran importancia, al haber logrado cerrar acuerdos con los dos nacionalismos históricos. La presunta imposibilidad de pactar con estas fuerzas era "una limitación grave", no sólo para el Partido Popular sino para el sistema democrático, según el análisis de la dirección del partido de Aznar, porque bloqueaba las posibilidades de alternancia.

Mayor Oreja insinuó ayer, tras su éxito con el PNV, que se puede abrir una etapa de sólido entendimiento del centro derecha. Los pactos, dijo, "son más sólidos de lo que algunos piensan" y quienes hacen "presagios desde la rabieta", en referencia a las críticas en tromba de los socialistas en los últimos días, "se va a comprobar que se equivocan".