El Defensor vasco propone un modelo de prisión basado en el tercer grado

El Ararteko (Defensor del Pueblo vasco), Xabier Markiegi, recomendó ayer a los poderes públicos un nuevo modelo de cumplimiento de las penas, basado en las condiciones de libertad que proporciona el tercer grado penitenciario, como fórmula para reconducir el "fracaso social" que supone el actual sistema. Sólo el 10% de los presos está en régimen- abierto.Markiegi concluyó, durante la presentación al Parlamento del estudio monográfico de las tres cárceles vascas, que entre la realidad y la legalidad "hay un abismo". También pidió a los empresarios que oferten puestos de trabajo para reclusos y la extensión de centros abiertos y otras alternativas a la prisión.

La filosofía del Ararteko se decanta claramente por el cumplimiento de las penas en -el entorno social del preso. En su opinión, los reclusos deben cumplirlas lo más cerca posible de sus familias. Sin embargo, ayer constató la dificultad para hacer cumplir el acuerdo de la Cámara vasca del pasado 28 de diciembre, en el que se pedía el acercamiento de los presos vascos, debido a las pocas plazas existentes. En Martutene (Guipúzcoa) y Basauri (Vizcaya) el 90% de los presidiarios son residentes en el País Vasco, mientras que en Nanclares de la Oca (Alava) sólo lo es el 15%.